El estado de Yucatán cuenta con un clima cálido subhúmedo con temperatura anual fluctuante entre 24.6 y 27.7° C en promedio. El suelo es llano con ligeros desprendimientos montañosos: sierra alta y sierra baja, además cuenta con manantiales subterráneos llamados cenotes, así como con extensos litorales frente a los cuales se encuentran dos grupos de islotes estériles y semidesiertos: Cayo Arenas y El Arrecife Alacranes. En este territorio se desarrolla una rica fauna en la que se cuentan algunas especies endémicas.
Entre las especies de batracios, podemos encontrar en Yucatán varios ejemplares de ranas. El más pequeño es una Hipopachus variolosus, de color café. Así como otras dos ranas arborícolas (Phrynohyas venulasa), cuyo tamaño normal es de cuatro centímetros, y una más (Hyla sp.), de cinco centímetros, que gusta de reposar sobre hojas verdes, al igual que sapos bufo (Bufo valliceps), quienes esperan alguna presa escondidos entre las piedras.
Es común ver, descansando sobre las blancas albarradas a los pasarios o toloc (Basiliscus vittatus) como comúnmente se les conoce y si caminamos por el monte de selva baja caducifolia podremos escuchar o ver alguna serpiente de cascabel (Crotalus durisus), o una culebra arborícola (Leptophys mexicano), aunque es más frecuente encontrarse a una larga boa o ratonera, que aunque son inofensivas para el hombre no dejan de inspirar temor.
En la selva yucateca no faltan los murciélagos como el zapotero (Artibeus jamaicensis) y el "dos líneas" (Sacropteryx bilineata), llamado así por los dos colores y formas que tiene en la piel.
Entre los felinos menores que deambulan aun en nuestro territorio están el yaguarundi y el ocelote, así como algunos mamíferos: armadillos, venado cola blanca, jabalí y tepezcuinte.
Los arboles siempre están poblados de aves canoras y de bello plumaje como el pájaro Toh (vocablo maya que significa reloj) llamado así por una larga pluma que hace de cola y que, cuando está posado, mueve rítmicamente a manera de péndulo; chinchimbacales, rojos cardenales, mariposos de tonos azul-verdoso, faisanes, halcones, codornices, así como escandalosas chachalacas
En cuanto a la fauna marina existen varias especies endémicas tales como la langosta, el pulpo de la especie Octopus Maya y el mero, así como la artemia, un microorganismo que sirve para alimentar camarón o peces de ornato.
Las playas del norte de Yucatán son consideradas hoy día "el santuario más importante del mundo para la preservación de la tortuga carey". En el mundo existen sólo ocho especies de tortugas marinas y la mayoría de ellas está en peligro de extinción. En México anidan siete de estas especies, pero a Yucatán sólo llegan tres variedades: carey, blanca y caguama, esta última en menor número. La tortuga carey anida en todas las playas de Yucatán, y la blanca sólo en las de la Reserva Ría Lagartos.
Entre las especies de batracios, podemos encontrar en Yucatán varios ejemplares de ranas. El más pequeño es una Hipopachus variolosus, de color café. Así como otras dos ranas arborícolas (Phrynohyas venulasa), cuyo tamaño normal es de cuatro centímetros, y una más (Hyla sp.), de cinco centímetros, que gusta de reposar sobre hojas verdes, al igual que sapos bufo (Bufo valliceps), quienes esperan alguna presa escondidos entre las piedras.
Es común ver, descansando sobre las blancas albarradas a los pasarios o toloc (Basiliscus vittatus) como comúnmente se les conoce y si caminamos por el monte de selva baja caducifolia podremos escuchar o ver alguna serpiente de cascabel (Crotalus durisus), o una culebra arborícola (Leptophys mexicano), aunque es más frecuente encontrarse a una larga boa o ratonera, que aunque son inofensivas para el hombre no dejan de inspirar temor.
En la selva yucateca no faltan los murciélagos como el zapotero (Artibeus jamaicensis) y el "dos líneas" (Sacropteryx bilineata), llamado así por los dos colores y formas que tiene en la piel.
Entre los felinos menores que deambulan aun en nuestro territorio están el yaguarundi y el ocelote, así como algunos mamíferos: armadillos, venado cola blanca, jabalí y tepezcuinte.
Los arboles siempre están poblados de aves canoras y de bello plumaje como el pájaro Toh (vocablo maya que significa reloj) llamado así por una larga pluma que hace de cola y que, cuando está posado, mueve rítmicamente a manera de péndulo; chinchimbacales, rojos cardenales, mariposos de tonos azul-verdoso, faisanes, halcones, codornices, así como escandalosas chachalacas
En cuanto a la fauna marina existen varias especies endémicas tales como la langosta, el pulpo de la especie Octopus Maya y el mero, así como la artemia, un microorganismo que sirve para alimentar camarón o peces de ornato.
Las playas del norte de Yucatán son consideradas hoy día "el santuario más importante del mundo para la preservación de la tortuga carey". En el mundo existen sólo ocho especies de tortugas marinas y la mayoría de ellas está en peligro de extinción. En México anidan siete de estas especies, pero a Yucatán sólo llegan tres variedades: carey, blanca y caguama, esta última en menor número. La tortuga carey anida en todas las playas de Yucatán, y la blanca sólo en las de la Reserva Ría Lagartos.